El proyecto se basa en una hipótesis donde tres ciudades: Jena, Weimar y Erfurt en la región de Turingia en Alemania, se convierten en un proyecto modelo de una nueva movilidad urbana más eficiente y cercana a las necesidades biológicas del ser humano.   

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Haciendo un poco de historia, según el Plan de Voison de Le Corbusier en 1925, donde mostraba una ciudad que nunca antes se había imaginado, con rascacielos, con grandes avenidas, coches, y en definitiva, una visión moderna de una ciudad del automóvil se convirtió en una declaración importante urbana, que determinó las ciudades de hoy en día. 80 años después de Le Corbusier, las ciudades se diseñan tan sólo para los coches. Pero, ¿y ahora qué? ¿qué viene después? ¿cómo funciona la ciudad cuando el espacio público ya apenas existe, y donde el coche ha pasado a ser el principal medio de transporte? Ha llegado el momento de pensar en un cambio, donde las estaciones de trenes, como espacio común, deben ser repensadas como intersecciones donde el flujo se aumente entre varios agentes, siendo estos el ferrocarril, la bicicleta y los viandantes. Estas intersecciones tendrán la oportunidad de ser regeneradores del espacio, y además, de lugares comprendidos como enlaces.

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Esto se hace posible reduciendo el tráfico motorizado un 50% y aumentando la movilidad “verde” con el uso de bicicletas y trayectos a pie en un 50% más. El concepto principal es el de la teletransportación y la sensación de una movilidad más rápida y efectiva.

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Para atender a este concepto, se plantea un punto conector importante donde puedas enlazar cada 10 minutos, como máximo, con las ciudades del alrededor, y sirva de conexión entre la zona norte y sur de Weimar. Con esto, se consigue generar una comunicación más efectiva en cuanto al funcionamiento de la ciudad.

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La estación como nexo central, además de punto neurálgico de la trama urbana, generará conexiones verticales y horizontales incluyendo la movilidad del futuro, como bicicletas y otros dispositivos eléctricos.

Gracias a la conexión generado por la estación central, se proceden a naturalizar vértebras de la ciudad donde el espacio sea más amable para el usuario.

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El nuevo trazado de bicicletas tiene en cuenta una prioridad para poder circular lo más rápido posible y así incentivar su uso.

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El tercer punto del proyecto se basa en la generación de zonas adyacentes que queden sumergidas e integradas en la nueva movilidad, ya sea con la estación central, como con el centro de la ciudad y el trazado de carriles bicis ultrarrápidos.

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